miércoles, 9 de enero de 2008

Ayer cuando salía de tu casa, que por cierto, una limpieza no le vendría nada mal, adivina a quien me encontré, va piensa un poco, frío, uy muy frío, umm templado, que, ¿no? a Peter, si el mismo Peter que se tiraba a tu mujer, me invitó a un trago, bueno, a unos cuantos. Me preguntó por ti, le dije que estabas cojonudo, que salías con una tía, por qué digo yo que aun estás con Helen, ahora que lo pienso hace días que no la veo, ¿va todo bien entre vosotros?. Peter se despidió pronto, tenía una actuación en el Seattle.
Sabes una cosa amigo Buddy, Ya sabes que Helen me cae bien pero que quieres que te diga, no es tu tipo, antes compartías las noches conmigo en cualquier bar en cualquier conversación de locos, ahora en cambio, me echas la bronca cada vez que bebo, no sé, lo echo de menos tío, creo que nos estamos distanciando, que hemos partido por caminos distintos. El mío es un camino sinuoso, estrecho, con agujeros y piedras que acabará en algún cementerio anónimo, ya imagino la descripción en la pequeña cruz medio oxidada "aqui descansa un hombre que es un heroe, por que dio su vida por el alcohol". En cambio tu camino querido amigo, se tiñe de flores, de luces, de sexos festivos, creo que me estoy poniendo triste, muy triste queridísimo amigo, necesito recordar que puedo olvidar, voy a beber.

King

No hay comentarios: